Como es conocido por todos, el pasado 28 de abril, un apagón eléctrico dejó sin suministro a empresas de todo el país durante más de 6 horas. En Burgos, muchas industrias se vieron gravemente afectadas, pero sorprendentemente no se han presentado reclamaciones formales. ¿Por qué?
En un reciente artículo publicado por el Diario de Burgos, nuestro compañero Sergio Carpio Mateos, socio director del área jurídica en nuestro despacho en Burgos, analiza esta situación y lanza una advertencia clara:
«A día de hoy, las distribuidoras contra las que se pueden dirigir las reclamaciones pueden alegar lo que quieran y esparcir las responsabilidades sin que ellas queden señaladas».
En su opinión, la falta de una explicación oficial ha desincentivado a las empresas a iniciar procedimientos legales, aunque algunas ya han comenzado a consultar opciones con nuestro despacho.
Sergio también recuerda su experiencia en cortes, principalmente, en hoteles y restaurantes. La caída eléctrica paralizaba el acceso a las reservas. «Algunos casos, se resolvieron a favor del cliente porque los daños estaban acreditados por la comparación de reservas con otros años y por los sistemas de alarma, que dieron fe de la ausencia de luz»
Lee el artículo completo en el Diario de Burgos y, si tu empresa se vio afectada y deseas orientación, no dudes en contactar con nosotros.
